Aceptémoslo, en algún momento de nuestra vida pensamos que nuestra familia es la más rara que existe. Una familia donde todos son extraños. Un papá amante de la naturaleza que enseña a sobrevivir a sus hijos en el patio trasero, una mamá súper amorosa que reparte calcomanías de estrellita a cada momento, un chico mega fan de los dinosaurios que usa el viejo directorio telefónico para buscar quién le cuente sobre la prehistoria, y Katie, la más cuerda de la familia, una adolescente a punto de ir a la escuela de cine, y bueno, hasta el perro es raro, tiene ojos de camaleón. Así es la familia Mitchell.
Katie está lista para ir a la universidad y dejar atrás a su alocada familia, pero su papá cambia de idea y decide emprender un viaje familiar en carretera para llevarla a la escuela de cine. ¿Qué más podría salir mal? Pues mucho. Pal, una asistente virtual tiene un mal día y decide expulsar a los humanos del planeta. Los Mitchells logran sobrevivir por puritita suerte.
La película cuenta con una espectacular combinación de animación 2D y 3D, además Katie como toda buena cineasta, se permite editar la cinta y agregar sus propios dibujos, lo cual le da un ritmo divertido y muy único.
Los productores Phil Lord y Chris Miller la vuelven a hacer en grande. ¿No te suenan? Te cuento, Lord y Miller son los creadores de Lluvia de hamburguesas, Cigüeñas, The Lego Movie, Spider-Man: un nuevo universo. Su estilo visual, su humor y el trabajo en equipo se ve reflejando en Los Mitchell contra las máquinas.
La cinta es dirigida por Mike Rianda. El guion es ingenioso y ligeramente cuestionador, cómo citar una de las leyes de robótica establecidas por Isaac Asimov, o bien puntualizar la dinámica con la tecnología y sus consecuencias, hasta la crítica de la privacidad de datos. Hay una secuencia fenomenal protagonizada por los Furbys que es tan inquietante como entretenida.
Los Mitchells son una familia entrañablemente imperfecta y es justo esa imperfección lo que nos ofrece una película divertida y cálida, llena de risas y momentos asombrosos. Las voces están muy bien seleccionadas especialmente la voz de Pal, interpretada por la gran Olivia Coleman, protagonista de la Hija Oscura. Con su acento muy británico, nos ofrece una deliciosa asistente malvada que solo necesita una razón para salvar a la humanidad.
En definitiva Netflix acierta en su apuesta por los films de animación, ya que Los Mitchells vs las máquinas está nominado a los Oscars 2022 en la categoría de mejor cinta animada.
Disfrútala en Netflix.